Miami (EE.UU,), 7 may (EFE).— Enrique Iglesias, uno de los artistas más influyentes de las últimas décadas en la música latina, celebra este jueves su 50 cumpleaños en un momento de plenitud tanto en su vida personal como profesional, mientras prepara su retorno este verano a los escenarios de España tras casi seis años de ausencia.

Este regreso a su país es un preludio de la conmemoración de sus primeros 30 años como artista profesional, una carrera que se forjó inicialmente en secreto, sin que lo supiera ni su famoso padre, Julio Iglesias, y sin que los ejecutivos discográficos que le dieron la primera oportunidad conocieran su apellido.

Recién estrenados los 20 años, debutó en noviembre de 1995 con su primer disco, ‘Enrique Iglesias’, que incluía sencillos como ‘Por amarte’ y ‘Experiencia religiosa’. Vendió seis millones de copias y le valió un Grammy.

Los 50 le encuentran aún con su aspecto juvenil y un compromiso con su niño interior. “He aprendido mucho, pero espero que no haya madurado porque quiero seguir siendo el mismo chaval inmaduro que era cuando tenía 18”, dijo a la revista People poco después de cumplir los 40.

También está decidido a no sacar más álbumes -aunque sí singles-, después de convertirse en uno de los artistas latinos de más éxito, con más de 180 millones de discos vendidos y un total de 154 sencillos en las listas de popularidad de Billboard, según los datos de su web oficial.

Lo que ha descrito como su último álbum se llama ‘Enrique Iglesias Final Vol.2’ (2024) y, en una entrevista con EFE antes de su lanzamiento, el artista explicó que “el mundo de la música ha cambiado y ya no es necesario sacar discos en la forma en la que la concebíamos antes”.

Así cierra su producción discográfica de 12 álbumes, cinco de ellos bilingües, porque el español fue uno de los primeros en combinar ambos idiomas en su música y en sus producciones discográficas y también fue pionero en el reguepop, con su éxito ‘Bailando’, su icónico tema con Descemer Bueno y Gente de Zona, que además se lanzó en portugués e inglés.

Su plan es publicas canciones -como su último tema, de este año: ‘Tamos Bien’, con Pitbull y IAmChino, y seguir recorriendo el mundo con sus giras, aunque dando prioridad a su familia, con la que reside en Indian Creek, una de las zonas más caras de Estados Unidos, ubicada en Miami.

Porque asegura que nunca se retirará de los conciertos. “Poder compartir un rato con mis fans y verlos cantar junto a mí es muy especial”, afirmó el cantante en la misma entrevista con EFE.

Su más reciente concierto fue este 3 de mayo en Egipto y el próximo 5 de julio recalará en Gran Canaria, en el Festival Granca Live, en lo que supone su único concierto este año en España, su país de origen, aunque vive en Estados Unidos desde 1984.

El secuestro de su abuelo en España hizo que Enrique y sus hermanos Chábeli y Julio José, se mudaran a Miami con su padre, que estaba en lo más alto de su fama, lo que hizo que crecieran con una gran exposición mediática.

Su reacción ya de adulto fue esforzarse al máximo por mantener su intimidad y poco se sabe de los detalles de su relación de más de dos décadas con Anna Kournikova. Ni siquiera se sabe si se han casado, pese a las especulaciones de la prensa rosa sobre la supuesta alianza que se le ha visto a la extenista.

Tampoco dieron publicidad al nacimiento de sus tres hijos -los mellizos Nicholas y Lucy, de seis años, y Mary, de cuatro- aunque en entrevistas recientes, el artista se ha ido abriendo a compartir su felicidad por poder disfrutar del crecimiento de sus hijos y participar activamente en su crianza.

“Estoy en plan relax, en casa con los niños, disfrutando de poder llevarlos al colegio, verlos crecer. Cada día que pasa crecen rapidísimo y quiero disfrutar”, declaró Enrique durante su última visita a España en noviembre pasado, en la gala de Los40 Music Awards.