Nueva York – Las autoridades de Bahamas se reunirán hoy con representantes de la Unión Europea (UE) para examinar y buscar una solución frente a la decisión de la comunidad europea de incluir al archipiélago en su “lista negra” de paraísos fiscales.

Según dijo a periodistas el jefe de la Fiscalía de Bahamas, Carl Bethel, los ministros de Economía y Servicios Financieros, Peter Turnquest y Brent Symonette, respectivamente, tendrán la encomienda de persuadir a los funcionarios de la UE.

Los delegados del Gobierno harán énfasis en “el daño económico que le podría provocar a Bahamas” dicha decisión, según lo adelantó Carl Bethel.

Según el documento aprobado por los ministros de Economía y Finanzas de la UE, Bahamas “facilita la creación de estructuras offshore (opacas) y acuerdos con el fin de atraer beneficios sin sustancia económica real”.

El Gobierno de Bahamas anunció el domingo que este lunes enviaría una carta formal a la UE para expresar su preocupación sobre los planes del bloque de incluir al archipiélago en su “lista negra” como un paraíso fiscal, pese a que el territorio se unió al listado estándar de países de la UE a finales de la semana pasada.

Bethel agregó que se comunicó con la plantilla de la Fiscalía general para redactar esa carta manifestando sus preocupaciones, específicamente sobre la aptitud de compañías multinacionales de usar estructuras y productos financieros locales para evasión fiscal.

Carl Bethel aseguró que los fiscales “produjeron una buena medida”, la cual se compartió con el primer ministro de Bahamas, Hubert Minnis, así como con los ministros de Economía y Servicios Financieros, para que trabajen con “los miedos y preocupaciones” de la UE.

El jefe de la Fiscalía de Bahamas igualmente mencionó que hubo “falta de comunicaciones” frente al riesgo del archipiélago atlántico de ser incluido en la “lista negra” como un paraíso fiscal.

Sin dar explicaciones, Bethel dijo que la UE falló en notificarle a las Bahamas sobre el “tiempo y los detalles de implementación” que buscan para intentar frenar la evasión fiscal de las multinacionales.

La primera lista negra de este tipo de la UE fue aprobada en diciembre 2017 con un total de 17 países y en enero se redujo a nueve.

Para elaborarla, la UE evaluó el nivel de cooperación en materia fiscal de 92 jurisdicciones e instó a aquellas en las que detectó prácticas que favorecen la evasión de impuestos u opacidad fiscal a presentar compromisos de cambio en sus regímenes para evitar entrar en la lista. EFE