Alfonso Fernández

Nueva York – El índice de desempleo en EE.UU. bajó en marzo al 4,5 %, la cifra más baja en una década, pero el ritmo de generación de empleo se ralentizó hasta los 98.000 nuevos puestos de trabajo, notablemente por debajo de las expectativas.

El informe del Departamento de Trabajo divulgado hoy mostró un descenso de dos décimas en la tasa de desempleo, frente al 4,7 % de febrero, en un nuevo indicador de la mejoría del mercado laboral estadounidense.

No obstante, la tibia cifra de generación de 98.000 nuevos empleos, fue mucho menor de la esperada por los analistas, que habían anticipado casi el doble, 185.000.

Se trata del tercer informe de desempleo bajo el gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, quien prometió durante la campaña electoral crear 2,5 millones de empleos al año, lo que supondría 208.000 al mes.

En los primeros tres meses del año, la media mensual ha sido de 178.000.

En marzo, los economistas señalan que la creación de empleo se vio afectada por la fuerte tormenta de nieve que azotó el noreste y el medio oeste de Estados Unidos.

Por sectores, el privado agregó 89.000 empleos, frente a los 221.000 del mes pasado. El sector público, por su parte, creó 9.000 empleos, 1.000 menos que en febrero.

La industria de servicios, con un incremento de 56.000 empleos, y las de salud (16.000) y minería (11.000) crecieron saludablemente; mientras que el de ventas minoristas registró las mayores pérdidas, con 30.000 empleos menos.

El indicador del salario medio por hora, se incrementó respecto a febrero apenas un 0,2 %, hasta los 26,14 dólares, y a nivel interanual, en relación a marzo de 2016, el alza acumulada en los salarios creció en un 2,7 %.

Habitualmente, en los años de bonanza económica los salarios crecen entre un 3 % y un 4 % anual.

Por su lado, la tasa de participación, que refleja el número de personas en edad de trabajar que buscan activamente empleo, se situó en el 63 %, sin cambios respecto al mes anterior.

“Aunque los detalles del informe de marzo fueron un poco flojos, creo que el mercado laboral se encuentra en buena forma y seguirá mejorando a lo largo de 2017”, dijo Gus Faucher, economista jefe del grupo de servicios financieros PNC.

El dato de desempleo de marzo coincide con la lectura de la Reserva Federal (Fed) de que la economía estadounidense se encuentra en niveles próximos al pleno empleo, y agrega argumentos para continuar en el ritmo de ajuste monetario, después de las dos subidas de tipos de interés en apenas cuatro meses.

En teoría, estos niveles de bajo empleo deberían impulsar las presiones sobre los salarios, ya que ante menos trabajadores disponibles los empresarios deberían ofrecer mayores compensaciones, pero los economistas consideran que este mecanismo está operando de manera más lenta de lo previsto.

Actualmente, los tipos de interés en EE.UU. se encuentran en el rango de entre el 0,75 % y el 1 %, y la presidenta del banco central Janet Yellen ya ha adelantado que si la economía mantiene su ritmo de crecimiento podrán llevarse a cabo dos nuevos ajustes monetarios a lo largo de 2017.

“Las compañías que están creciendo quieren contratar a los trabajadores realmente buenos, y cuando tienes una tasa de desempleo de menos del 5 %, eso quiere decir que hay escasez de ese tipo de trabajadores”, indicó Tom Gimbel, director jefe de la empresa de recursos humanos LaSalle Network.

Los mercados financieros recibieron el informe de desempleo con dudas, y el Dow Jones de Industriales, el principal indicador de Wall Street, registraba un descenso del 0,13 % poco después del inicio de la sesión, algo a lo que contribuyeron las noticias del ataque militar estadounidense a una base aérea de las tropas del régimen sirio del presidente Bachar al Asad. EFE