Nueva York – Septiembre es el Mes Nacional de Prevención del Suicidio, un mes dedicado a reconocer a las personas que luchan con condiciones de salud mental no tratadas y pensamientos suicidas, y reducir el estigma asociado con ambos.

Según las estadísticas más recientes, el suicidio está aumentando a nivel nacional, y es lasegunda causa principal de muerte entre los niños de 10 a 14 años y entre los adultos de 25 a 34 años en los Estados Unidos. Solo en el 2020, hubieron 45,979 muertes por suicidio, que equivale aproximadamente a una muerte cada 11 minutos.

El estigma en torno a la salud mental todavía existe a pesar del aumento en la conciencia. El miedo a ser juzgado o la discriminación puede evitar que las personas que sufren con un problema de salud mental busquen el tratamiento que necesitan. Sin ayuda o tratamiento, los sentimientos de desesperanza y soledad pueden crecer, llevándolo a uno a considerar pensamientos suicidas. Además, los sentimientos de estrés, ansiedad, depresión y aislamiento durante la pandemia del COVID-19 pueden haber exacerbado estos resultados y puesto más tensión en la salud mental de las personas.

Para aquellos con trastornos de salud mental, como depresión y trastorno bipolar, puede haber un mayor riesgo de suicidio, ya que estudios indican que la tasa de suicidio para aquellos que tienen trastorno bipolar es de 10 a 30 veces más que la población general.

Investigaciones recientes muestran que casi ocho de cada 10 personas que están sufriendo presentan señales de que están considerando el suicidio. Independientemente de si usted conoce a alguien que actualmente está luchando con su salud mental, puede ser útil aprender cómo ayudar a detectar algunas de las señales de suicidio, reducir el estigma que rodea la salud mental, y entender cómo intervenir y buscar tratamiento clínico.

Las siguientes señales de advertencia pueden significar que una persona está considerando suicidarse y puede necesitar ayuda urgente:

• Mencionar que son una carga
• Estar aislado
• Aumento de la ansiedad
• Hablar de sentirse atrapado o con un dolor insoportable
• Aumento del consumo de sustancias
• Buscar una manera de acceder a medios letales
• Aumento de la ira o la rabia
• Cambios de humor extremos
• Expresar la desesperanza
• Dormir demasiado o muy poco
• Hablar o publicar sobre querer morir
• Hacer planes para el suicidio

Los estudios demuestran que incluso hablar con franqueza o simplemente estar ahí para una persona que está en un estado mental oscuro puede ayudar a reducir los pensamientos suicidas. Si un sistema de apoyo o una persona interviene desde el principio, puede ayudar a salvar una vida.

“Pregunten cómo están,” aconsejó Solomon Thomas de los NY Jets durante un foro reciente de la Prevención del Suicidio, hablando sobre la pérdida de su hermana por suicidio. “Creo que es importante y poderoso decirle a alguien lo mucho que los quieres aquí y lo mucho que los necesitas aquí.” Agregó el jugador, “Solo escúchenlos… y asegúrense que se sientan escuchados.”

Considere estos consejos para ayudarle a iniciar una conversación:

Demuestre estar preocupado por los cambios recientes que ha notado en su estado de ánimo o comportamiento de una manera que no sea confrontativa o muy crítica.
Mantenga simples las preguntas y pregunte cómo están, lo que están sintiendo y cómo puede ayudar a proporcionar apoyo.
Sugiera acudir a un recurso de apoyo de recuperación local o a un profesional capacitado para ayudar con este tipo de problemas. Un número creciente de proveedores de atención de salud mental ofrecen visitas virtuales que pueden ayudar a facilitar el acceso de las personas a la atención de salud mental cuando la necesitan. Muchos programas de asistencia a empleados también ofrecen apoyo de salud mental.
Después de su conversación inicial, mantenga el contacto con ellosregularmente. Contar con el apoyo constante de familiares y amigos puede ayudar a marcar una gran diferencia en el bienestar de las personas.
Tome medidas si el individuo no es receptivo a su ayuda, está amenazando con lastimarse, buscando maneras de quitarse la vida o habla, escribe o publica constantemente sobre la muerte y el suicidio de una manera que parece fuera de lugar. Debe tomar medidas y llamar al 9-1-1. Puede ser la diferencia entre la vida y la muerte.
Al tomar estos pasos para estar presente para alguien que este sufriendo, usted puede contribuir a salvar su vida.

Para más información y recursos, visite uhc.com.