EEUU quiere tratar a Latinoamérica como un “igual” y dejar que otros lideren
Desde 2012, el Gobierno colombiano y estadounidense tienen un acuerdo para que la Policía Nacional de Colombia, su Marina y sus Fuerzas Aéreas entrenen a las fuerzas de seguridad de Centroamérica.
Beatriz Pascual Macías
Nueva York – El secretario estadounidense de Seguridad Nacional, John Kelly, cree que EE.UU. debe abandonar su posición de “dominancia” sobre Latinoamérica para tratar a la región como un “igual” y permitir que otros países, como Colombia y México, asuman el liderazgo en el desarrollo de Centroamérica.
En una entrevista con Efe, Kelly habló sobre cómo el Gobierno de Donald Trump tiene previsto relacionarse con Latinoamérica y, especialmente, con los países del Triángulo Norte (Guatemala, El Salvador y Honduras), que hoy y mañana protagonizan en Miami una cumbre sobre economía y seguridad.
“Un punto esencial es que debemos ser aliados al mismo nivel, no una fuerza dominante, que lo sabe todo y les dice a los otros lo que tienen que hacer. Hemos de ser aliados iguales para resolver los problemas trabajando juntos”, dijo Kelly, que conoce bien la región por su experiencia como jefe del Comando Sur, entre 2012 y 2016.
Consideró, además, que la experiencia muestra que la intervención de EE.UU. no siempre ha dado los mejores frutos y que, por ello, ahora su país debe dar un paso atrás en favor del respeto a la soberanía de las naciones latinoamericanas.
“Tienen sus democracias, sus presidentes, sus legisladores, sus cortes, su Policía. Estados Unidos es cercano a la cultura pero en cierto modo es diferente. No creo que haya funcionado nunca muy bien cuando EE.UU. le ha dicho a alguien lo que tiene que hacer”, argumentó Kelly.
“Creo -continuó- que es mejor que, como estamos diciendo todo el tiempo, seamos socios igualitarios que están preparados para ayudar al otro tanto como puedan”.
De esa forma, el titular de Seguridad Nacional indicó que EE.UU. quiere mostrar un compromiso “positivo” con Centroamérica y ayudar a la región económicamente, tratando de servir como intermediario para que empresas inviertan en la región y mejoren así las condiciones económicas de la población.
“Si nosotros podemos traer la inversión económica, eso en particular, sería un punto de inflexión en toda la región”, explicó.
En ese sentido, Kelly destacó la importancia de disminuir las tasas de desempleo en los países del Triángulo Norte y crear oportunidades para los jóvenes con el objetivo de que, cuando se les plantee la posibilidad de emigrar, decidan quedarse porque tienen oportunidades reales de progresar.
“Quizá lo más importante es que la gente que vive en estos países tenga un mejor futuro allí y no tenga que caer en peligrosas y costosas redes para atravesar México y llegar a EE.UU.”, resaltó.
Mientras EE.UU. se perfila como agente económico para Centroamérica, Kelly expresó su deseo de que otros países del continente americano asuman el liderazgo en el plano de seguridad.
“Francamente, preferiría que los poderes regionales se ayudarán los unos a los otros antes de que Estados Unidos venga y trate de decirles qué hacer”, dijo.
“Hay -prosiguió- una gran policía y unas grandes Fuerzas Armadas en grandes países como Colombia, México, Chile, Perú, en todos lados. Y preferiría que ellos fueran los que mostraran a los centroamericanos el camino a seguir antes que Estados Unidos por muchas razones”.
En concreto, Kelly consideró que las fuerzas de seguridad de México han sumado “una gran experiencia” y, por ello, están capacitadas para entrenar a la policía de Centroamérica en el combate contra la corrupción, la violencia, el tráfico de drogas y el crimen organizado.
“Tienen una gran experiencia, una gran Inteligencia, una gran Armada y un gran cuerpo de Marines, todo eso es muy útil para asesorar a sus amigos en el sur”, subrayó.
Además, Kelly expresó su deseo de que las fuerzas de seguridad colombianas incrementen su cooperación con sus homólogos en Centroamérica, ahora que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) han firmado la paz y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) está en negociaciones.
Desde 2012, el Gobierno colombiano y estadounidense tienen un acuerdo para que la Policía Nacional de Colombia, su Marina y sus Fuerzas Aéreas entrenen a las fuerzas de seguridad de Centroamérica.
“Esperaría que ahora que están libres de la maldición de las FARC y, espero que pronto del ELN y del resto de los terroristas, puedan tener algún tiempo adicional para pasarlo con los centroamericanos”, manifestó Kelly, quien, no obstante, puntualizó que la decisión “por supuesto” es de Colombia.
Este viernes concluirá la cumbre sobre Centroamérica, que presiden al mismo tiempo los Gobiernos de EE.UU. y de México y en la que participan líderes de El Salvador, Honduras, Guatemala, así como responsables de la Unión Europea (UE) y de organismos como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). EFE