El spaghetti aglio e olio es un plato tradicional de la cocina italiana, originario de la región de Nápoles. Su nombre significa literalmente “espaguetis con ajo y aceite”, y es una receta que destaca por su simplicidad y sabor. Se prepara con pocos ingredientes básicos: ajo, aceite de oliva, perejil y pimienta roja (que es opcional pero añade un toque extra) lo que lo convierte en una opción rápida y deliciosa para cualquier ocasión. Este plato es vegetariano pero puede servirse con cualquier proteína que desee. Pero créenos, llena lo suficiente como para que ni siquiera necesites carne para acompañar este delicioso clásico.

Ingredientes (para 2 personas):

• 200 g de espaguetis
• 4 dientes de ajo
• 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
• 1 guindilla o chile seco (opcional)
• Perejil fresco picado al gusto
• Sal al gusto
• Queso parmesano rallado (opcional)

Preparación:

1. Cocina los espaguetis en una olla con abundante agua con sal, siguiendo las indicaciones del paquete hasta que estén al dente. Reserva una taza del agua de cocción antes de escurrirlos.
2. Mientras se cocinan los espaguetis, pela y corta los ajos en láminas finas.
3. En una sartén grande a fuego medio, calienta el aceite de oliva y añade los ajos junto con la guindilla (si la usas). Sofríe hasta que los ajos estén dorados, pero sin quemarse.
4. Agrega los espaguetis escurridos a la sartén y mezcla bien para que se impregnen del aceite y el ajo. Si es necesario, añade un poco del agua de cocción reservada para que la pasta quede más jugosa.
5. Incorpora el perejil picado y mezcla nuevamente.
6. Sirve caliente, con un poco de queso parmesano rallado por encima si lo deseas.

Este plato es la prueba de que con ingredientes simples se pueden lograr sabores espectaculares. ¡Buon appetito!