Legislativo de P.Rico controla demandas por impericia médica
El presidente del Colegio de Médicos Cirujanos de Puerto Rico, Víctor Ramos, dijo hoy a Efe que se trata de una iniciativa positiva que favorece la entidad que encabeza y que puede ayudar a que se reduzcan las demandas que se presentan actualmente contra los galenos, la mayoría de ellas infundadas.
Nueva York – El Legislativo puertorriqueño promueve la puesta en marcha de paneles de profesionales que analicen la pertinencia de las demandas por impericia médica que se presentan contra los médicos, causa de la emigración de cientos de profesionales de la isla durante los últimos años hacia EEUU.
El presidente del Colegio de Médicos Cirujanos de Puerto Rico, Víctor Ramos, dijo hoy a Efe que se trata de una iniciativa positiva que favorece la entidad que encabeza y que puede ayudar a que se reduzcan las demandas que se presentan actualmente contra los galenos, la mayoría de ellas infundadas.
Ramos participó esta semana en unas vistas públicas iniciativa de la Comisión de Salud de la Cámara de Representantes de Puerto Rico con el objetivo de poner freno al éxodo de médicos de la isla, que a las razones económicas suman las demandas como motivos para emigrar a EEUU, lo que ya ha provocado la falta de profesionales en algunas especialidades.
La iniciativa es el Proyecto de la Cámara 1083, que expone que los profesionales de la salud están haciendo las maletas cada vez en mayor número debido al riesgo de ser demandados por impericia médica.
De hecho, según la información que provee la Comisión de Salud de la Cámara de Representantes, entre los años 2009 y 2014 en Puerto Rico el número de médicos se redujo de 13.452 a 11.088, lo que equivale a una pérdida anual de 472 de estos profesionales o 1,2 por día.
Ramos explicó que el Proyecto de la Cámara 1083 establece que cada una de las denuncias por impericia médica que se presente contra un profesional sea valorada por panel que estaría compuesto por un abogado, un médico y una tercera persona proveniente del sector público.
El juez encargado de la demanda sería el responsable de nombrar a los tres miembros del panel, quienes tendrán la tarea de pronunciarse sobre si la demanda carece de fundamento y se presentó con el objetivo de obtener un beneficio económico.
En el caso de que los profesionales que componen el panel determinaran que la demanda es infundada se establecería una fianza para el demandante que no se le devolvería si finalmente el juez determina esta como improcedente.
“Anualmente se presentan cerca de 1.000 demandas por impericia médica por año de las que solo entre 10 y 20 prosperan en una sentencia por parte del juez”, dijo el presidente del Colegio de Médicos Cirujanos.
Ramos matizó que esos números demuestran que la gran mayoría no tienen fundamento alguno, pero, sin embargo, el hecho de que se presenten crea gran inquietud entre los profesionales, que en muchos casos optan por emigrar hacia EEUU, donde los salarios son mucho más altos y hay mejores condiciones laborales.
Dijo que las demandas infundadas provocan además otro efecto no deseado, ya que, de hecho, ante la amenaza de ser demandados en muchas ocasiones médicos de algunas especialidades optan por evitar atender a pacientes, lo que obliga a que sean trasladados a muchos kilómetros de distancia al Centro Médico, el principal hospital de la isla en San Juan donde los profesionales están mejor protegidos ante estas denuncias.
En representación del Departamento de Salud se pronunció Norma Ortiz, quien dio su visto bueno a la iniciativa, además de recomendar definir los términos y conceptos referentes a la reclamación sin mérito, la reclamación frívola, litigante insolvente y representante de interés público, todos los cuales aparecen en el proyecto de ley.
Dijo además que debe establecerse en la legislación el monto que puede alcanzar la fianza, los aspectos relativos al proceso de confiscación de la fianza y a qué fondo habrá de depositarse la fianza confiscada.
Emilio Ruiz, en representación de la Oficina del Procurador del Paciente, sostuvo que la propuesta es de gran relevancia y pertinencia, puesto que provee un grado de seguridad a los médicos. Recomendó por ello a la comisión encargada del tema que se incluya una cláusula en la que se disponga que del miembro del panel ser abogado, este no haya practicado en litigios de impericia médica, pues su interpretación del caso pude verse perjudicada. EFEUSA