Moda sostenible y consumo responsable, un tema urgente en Latinoamérica
La cantidad de agua que se desperdicia para producir una prenda, los tintes tóxicos que se vierten a los ríos y las condiciones de precariedad laboral de quienes las fabrican son algunas de las prácticas que busca cambiar esta amante de la moda.
María José Brenes
Nueva York – El uso de materiales amigables con el ambiente de la industria textil y un consumo responsable son temas urgentes que necesitan aplicarse en Latinoamérica, afirmó en entrevista la creadora de la iniciativa Costa Rica Fashion Summit, Andrea Somma, evento que busca impulsar una moda sostenible.
La cantidad de agua que se desperdicia para producir una prenda, los tintes tóxicos que se vierten a los ríos y las condiciones de precariedad laboral de quienes las fabrican son algunas de las prácticas que busca cambiar esta amante de la moda.
Para Somma, el tema de la sostenibilidad en la industria textil es “urgente”, porque necesita de un consumidor más educado, que pueda tomar decisiones más informadas a la hora de comprar una prenda, no solamente en temas de la contaminación que se genera cuando se produce la ropa, si no también sobre las condiciones laborales de las personas que las fabrican.
“Se trata de sostenibilidad ambiental y justicia social, esto es muy importante porque de nada sirve tener un medioambiente limpio si tenemos a las personas trabajando en condiciones precarias, así que las dos cosas van de la mano”, expresó Somma, una uruguaya radicada en Costa Rica promotora y filántropa de la moda.
El Fashion Summit, que inicia hoy y se extenderá hasta mañana en San José, es una iniciativa independiente, sin fines de lucro, que busca alentar este enfoque medioambiental en el ámbito de la moda por medio de la creación del foro internacional de moda sostenible más importante de América Latina, según sus organizadores.
La industria de la moda es una de las más contaminantes del planeta y se estima que para 2030 los niveles de contaminación aumentarán el 60 %, por lo que para Somma es urgente abordar esta problemática y ofrecer soluciones.
Datos del movimiento Fashion Revolution indican que el 75 % de las personas que trabajan en la industria textil lo hacen bajo condiciones de precariedad laboral, en instalaciones no adecuadas, con horarios de 16 horas y salarios de 50 dólares al mes.
“La estrategia de muchas marcas es decir que desconocen las condiciones bajo las que se produce su ropa, porque ellos subcontratan. Pero son países del tercer mundo, en donde la gente trabaja sin garantías sociales y en condiciones infrahumanas. Esto no lo tenemos que ver como un hecho lejano porque esa ropa la usamos nosotros”, dijo Somma.
Otra de las problemáticas que enfrenta la industria de la moda es la promoción del hiperconsumismo. En las tiendas de “moda rápida” el 30 % de lo que se consume se usa solo una vez, lo que causa una gran cantidad de desechos con materiales de mala calidad que no soportan ser reciclados y reinsertados en el ciclo de consumo.
“Vivimos en un mundo que fomenta el hiperconsumismo y hay que ser compradores responsables, reflexivos, que primen la calidad sobre la cantidad, hacia ahí va el mundo. Sabemos que esta conducta frenética de comprar irreflexivamente es insostenible en términos medioambientales y tenemos que empezar a generar consciencia”, destacó Somma.
Según la experta, la industria debe avanzar hacia un enfoque de sostenibilidad como valor agregado, en donde destaquen los tintes amigables con el ambiente, la utilización de materiales reciclados, uso de tejidos más nobles y de ropa retro e intervenir ropa usada para reinsertarla en el sistema de venta.
“La tendencia de la industria es hacia la sostenibilidad como un valor agregado. Hay grandes marcas en este momento como Adidas y H&M que están viendo como incorporar la sostenibilidad en sus marcas para mantenerse en el mercado, como el uso de plástico del mar para realizar un par de tenis”, manifestó la uruguaya.
En el Fashion Summit se abordarán temas como la justicia social, responsabilidad corporativa, sostenibilidad medioambiental, moda lenta y empoderamiento del consumidor, así como estrategias de mercadeo y emprendedurismos para potenciar a los diseñadores emergentes.
Costa Rica será la sede permanente del Fashion Summit, evento que será realizado de forma anual. Los organizadores indicaron que el país fue elegido por su liderazgo mundial en temas de sostenibilidad ambiental y protección de la biodiversidad. EFE