Nueva York – El expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva olvidó por un rato sus problemas con la Justicia y se vistió de corto junto con el cantautor Chico Buarque para inaugurar un campo de fútbol en una escuela en la localidad de Guararema, en el interior del estado de Sao Paulo.

Artistas, intelectuales, políticos y exfutbolistas se dieron cita en este municipio, situado a unos 90 kilómetros de Sao Paulo, para estrenar en primera persona el campo bautizado como “Dr. Sócrates Brasileiro”, en la Escuela Nacional Florestan Fernandes.

El exmandatario y Buarque, uno de los más famosos representantes de la Música Popular Brasileña, fueron los grandes atractivos del evento, organizado por el Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST).

Lula, gran aficionado al fútbol y apasionado del Corinthians, vistió unos minutos el dorsal número 13 de una equipación con los colores blanco y negro, los mismos que el conjunto paulista, y hasta anotó un gol de penalti.

Motivado como el que más a sus 72 años se fue a celebrarlo con los aficionados allí presentes, 1.500 según los organizadores, e incluso no dudó en quitarse la camiseta y lanzarla a la hinchada.

Con el torso al descubierto, el exmandatario recibió, a modo de broma, una tarjeta roja, mientras los aficionados gritaban “Fora Temer” (Fuera Temer, en referencia al actual presidente brasileño, Michel Temer) y le pedían que volviese a la arena política.

El líder del Partido de los Trabajadores (PT), que gobernó Brasil entre 2003 y 2010, ha manifestado en repetidas ocasiones su deseo de presentarse a las elecciones presidenciales de octubre de 2018, pero su candidatura está en manos de la Justicia.

Lula fue condenado en primera instancia este año a nueve años y medio de prisión por corrupción en uno de los siete procesos abiertos en su contra, la mayoría relacionados con el caso Petrobras.

El expresidente recurrió en libertad y el próximo 24 de enero un tribunal de segunda instancia decidirá si ratifica o no la sentencia recibida, lo que puede impedir su eventual candidatura para las comicios presidenciales.

El dirigente del MST, Joao Pedro Stedile, defendió en declaraciones a Efe que “para salir de la crisis” el país necesita “movimientos populares” y proyectos como el de Lula.

También estuvieron presentes el exministro y exalcalde de Sao Paulo Fernando Haddad, así como Afonso Celso Garcia Reis, ‘Afonsinho’, legendario exjugador brasileño, quien fue uno de los primeros en luchar por los derechos sociales de los futbolistas.

Haddad comentó a Efe su deseo de que se haga Justicia y eso significa, en su opinión, “absolver a aquellos contra los que no se reunieron pruebas”, en alusión implícita a Lula.

El terreno de juego recibió tal nombre en homenaje a Sócrates Brasileiro, el mítico centrocampista de la Canarinha, fallecido en 2011.

Familiares y amigos del “Doctor” asistieron al partido benéfico, que también sirvió para rendir tributo al creativo de la selección brasileña, quien fue una de las voces públicas contra la dictadura militar que vivió el país entre 1964 y 1985.

El proyecto es una iniciativa de la Asociación de Amigos de la escuela, vinculada al movimiento social, y contó con la colaboración de un grupo de alumnos y profesores de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Sao Paulo (USP).

La construcción del recinto la llevaron a cabo 25 trabajadores voluntarios de los Sin Tierra y fue posible gracias a la financiación colectiva de personas que donaron en total unos 67.000 reales (unos 20.000 dólares). EFE