Bacterias tóxicas ligadas al calor amargan el verano
Durante los últimos días, los socorristas de muchas playas polacas prohíben terminantemente el baño ante el riesgo para la salud que provocan estas bacterias, aunque no es necesario que lo hagan con demasiada vehemencia porque el color verdoso y la textura espesa de las aguas donde han crecido las colonias de cianobacterias ya hacen de por sí poco apetecible darse un chapuzón.
Nacho Temiño
Nueva York – Las autoridades polacas han prohibido el baño en más de 50 playas del mar Báltico por la elevada presencia de cianobacterias, la más alta en la última década de esta bacteria tóxica, que se ha extendido por las costas de Polonia debido al aumento de las temperaturas y que puede producir problemas cutáneos por contacto.
“Cada año hace más calor y vemos como esta situación se hace, lamentablemente, más común”, explicó a Efe un socorrista en Sopot, la localidad costera más popular de Polonia, con dos millones de turistas anuales, donde este verano se ha limitado el baño en varias playas por la presencia de cianobacterias.
Las temperaturas registradas en el norte del país durante los últimos días, superiores a los 30 grados centígrados, han hecho que el agua esté más caliente de lo normal (en algunos casos por encima de los 22 grados), lo que ha favorecido la aparición de colonias de estas bacterias.
Las autoridades sanitarias regionales insisten en que, aunque el agua está limpia y no existen problemas por vertidos, el contacto con la bacteria puede causar alergias y problemas cutáneos, al tiempo que beber agua contaminada puede ocasionar problemas digestivos graves.
El mar Báltico vive este verano el afloramiento más elevado de cianobacterias de la última década, y también se ha detectado floraciones en algunos lagos y embalses interiores, como el embalse de Zegrze, cerca de Varsovia, muy popular para practicar vela ligera.
Los afloramientos masivos de cianobacterias -capaz de realizar la fotosíntesis- son fenómenos naturales en el ecosistema de aguas marinas o interiores, que se produce cuando coinciden varios factores: el citado aumento en la temperatura, el estancamiento y la falta de nutrientes en las aguas, la escasez de viento y una elevada irradiación solar.
En un afloramiento, las cianobacterias se presentan en grandes masas flotantes en el agua, de color pardo/marrón verdoso, de aspecto oleoso, formando natas y ocasionalmente espumas, que por su aspecto se pueden confundirse con aguas residuales aunque no tienen nada que ver.
Pueden producir un cuadro de irritación leve con dermatitis por contacto, por lo que las autoridades sanitarias polacas recomiendan no bañarse en los lugares de afloramiento, aunque sí puede hacerse en otra zona del mismo litoral en la que no hayan cianobacterias.
“Estas molestias pueden aparecer inmediatamente o unos días después de bañarse donde florecen las cianobacterias tóxicas”, explica la Inspección Sanitaria Polaca en su página web, donde se alerta de que, aunque “no se han registrado en mucho tiempo muertes de seres humanos por estas bacterias, los problemas para la salud han sido en ocasiones muy graves”.
“Nos tenemos que acostumbrar y familiarizar con las cianobacterias, que van a formar parte de cada verano mientras no cambien las condiciones climáticas”, lamenta Marek, propietario de una cafetería en Sopot, quien teme que si la situación empeora se acabe resintiendo el turismo que cada verano elige esta parte de la costa polaca.
Por ahora las previsiones no son muy halagüeñas, y se prevé que las altas temperaturas continúen en Polonia hasta al menos mediados de agosto, lo que favorecerá la aparición de más colonias de cianobacterias en las costas y lagos del país. EFE