Nueva York – Lil Hobbs, de 12 años, asiste regularmente a sesiones de hidroterapia por diversas afecciones de salud.

Pero el perro anciano se niega a hacer su parte y espera a que el instructor lo arrastre por la piscina.

Kathryn H, administradora universitaria de 34 años de San Diego, California, rescató a Lil Hobbs en la víspera de Navidad de 2016.

Ella vivía en la ciudad de Nueva York en ese momento y recientemente había terminado la escuela de posgrado.

Hobbs fue encontrado cojeando por las calles de la ciudad de Nueva York por Tails of Love Animal Rescue, un grupo de rescate de animales con sede en Nueva Jersey/Nueva York.

Kathryn vio su perfil en PetFinder, presentó una solicitud y se reunió con él con su equipo de acogida para dar un paseo introductorio en el East Village de Nueva York.

Ella dijo: “¡Vi a Lil Hobbs y pensé que era el nombre más lindo que había escuchado!

“La primera vez que lo vi… ¡Nunca había visto a un perro caminar más lento que él!

“Después de media cuadra, tuvo que tomar un descanso y simplemente se derritió en mis brazos; no permite que la mayoría de la gente lo sostenga, así que debe haberse sentido cómodo conmigo”.

Después de que ella lo adoptó, un veterinario le dijo a Kathryn que Lil Hobbs tenía muchos problemas de salud subyacentes, incluido el tejido cicatricial de los ligamentos desgarrados que nunca sanaron, cataratas, artritis, dientes flojos y fracturados y cojera permanente en su caminar.

En julio de 2021, comenzó la hidroterapia para Hobbs en The Animal Acupuncture and Rehabilitation Center, en San Diego, California.