Radhy Hernández tiene muchas pasiones en su vida, pero un solo amor: la radio. Como locutor cuenta con más de 27 años de trayectoria en el medio y una carrera como maestro de lengua española que ha sabido llevar de la mano y usar para acompañar su indiscutible talento vocal con una perfecta armonía gramatical.

Nacido en la República Dominicana, Radhy Hernández empezó a interesarse por la radio desde muy temprana edad. Cuenta con gracia que, cuando tenía 6 años, su mamá lo sorprendió desarmando un radio porque quería saludar a los “hombrecitos que están atrapados allá adentro”. Así fue despertando su inquietud por ser uno de esos “hombrecitos” y fue a los 15 años que tuvo su primer acercamiento oficial a una emisora de su ciudad.

Desde ese momento, ha caminado un largo recorrido que compartió con nosotros durante una amena visita a nuestra sede. Hoy en día se ha ganado el título de “locutor internacional” porque es llamado desde diferentes partes del mundo para campañas y animación de eventos: desde la Cadena Caracol y RCN de Colombia, hasta Univisión de Estados Unidos y Televisa de México. Radhy Hernández representa una cara familiar y una voz inconfundible.

Es maravilloso tenerte con nosotros, ¿qué te trae a Nueva York? Trabajo. Soy muy afortunado porque mi profesión me permite viajar mucho. Esta vez me contactaron para ser el maestro de ceremonia del Desfile Cultural de Newark, la directiva me trajo para animar la Cena de Gala junto a Marlenis Cruz, el propio Desfile y el Festival.

¿Así que disfrutas de la animación también? ¿Te has planteado estar en televisión? Disfruto de la animación porque puedo estar en contacto directo con la gente. Es exactamente como hacer radio, pero en persona. Por supuesto que me gustaría hacer televisión si se me da la oportunidad, pero no es algo que persigo. Como profesional siempre estoy abierto a nuevas oportunidades: “por su mejoría, hasta la casa dejaría”, pero la TV no me quita el sueño. A mí me dejan con mi radio y yo soy completamente feliz.

¿De qué temas prefieres hablar cuando estás al aire? Me gustan todos. En estos 27 años he aprendido  que un locutor debe estar preparado para hablar de cualquier cosa. He tenido programas desde deportes hasta arte y espectáculos, cada uno tiene su magia. No podría elegir uno. Actualmente estoy en “Paracontarte” que es de farándula y “Fiesta y mañana gallos” de merengue, ambos me encantan y son muy distintos.

¿Qué implica ser locutor? Una responsabilidad. Más allá de la pasión que pueda tener por este oficio me tomo muy en serio mi trabajo. Un locutor es un comunicador. Lo que dices al aire ya no te pertenece, hablas y le llegas a miles de personas del otro lado; por eso tienes que ser muy consciente y tomar responsabilidad de todo el contenido que compartes. Hay unos valores que siempre deben mantenerse, un lenguaje que debes cuidar. El objetivo es construir, no destruir. El medio es exactamente lo que haces de él.

Radhy, hablas mucho de la radio de antes y todo lo que ha cambiado con la tecnología. Si tuvieras que quedarte con una (la radio de antes o la de ahora), ¿cuál sería? Esa es una pregunta difícil (risas). Te diría que rescataría lo mejor de ambos mundos y así crearía la radio perfecta. De antes extraño el profesionalismo, no todo el mundo entraba a hacer radio. Había una preparación y unos estudios que completar. De la de ahora disfruto toda la expansión y cobertura que trae la tecnología. Puedes llegar a todos lados. Eso es lo positivo. Antes, por ejemplo, con las frecuencias y amplitudes (FM-AM) era difícil llegar a mucha gente con un buen nivel de calidad, la tecnología ha resuelto muchos problemas. También estabas amarrado a la silla y no tenías tiempo ni de ir al baño, la música se ponía con discos, era un tema. Hoy en día todo se resuelve con un click.

¿Hay alguna anécdota divertida que te haya pasado estando al aire? Tengo muchas. Me viene a la mente una vez que entré a trabajar de madrugada y me quedé dormido porque venía de una fiesta. El disco que estaba puesto sonó completo y yo seguía durmiendo. Estuvimos como 10 minutos al aire y sin sonido alguno. Nunca más me volvió a pasar del susto que agarré.

¿Tienes algún ritual para cuidar la voz? Estar sano. No fumar, mantenerse hidratado, dormir bien y no tener vicios. Cuando cuidas tu cuerpo, cuidas tu voz. Eso sí, la miel con limón es la solución mágica a cualquier molestia en la garganta.

¿Qué proyectos tienes próximamente? Quiero seguir trabajando en mi amada República Dominicana y seguir viajando a donde me llamen. Hay un proyecto que siempre he querido llevar a cabo y es un programa que salga al aire a nivel internacional, es algo que me encantaría hacer, vamos poco a poco por ese camino.

¿Qué consejo les darías a las personas que quieren hacer radio? Que se preparen, que estudien mucho y empiecen a involucrarse poco a poco, así sea desde lo pequeño. Las oportunidades están ahí y surgen cuando creemos en nosotros mismos y estamos seguros de lo que queremos.