La madrugada del martes, el techo de la emblemática discoteca Jet Set en Santo Domingo colapsó durante un concierto de merengue, dejando al menos 66 personas fallecidas y más de 160 heridas, según informaron las autoridades dominicanas.

En el lugar se encontraban políticos, atletas y otras figuras públicas disfrutando del evento cuando, alrededor de la 1 de la mañana, el techo de la estructura de una sola planta se desplomó repentinamente. Equipos de rescate trabajaron durante horas, removiendo escombros y utilizando herramientas para tratar de salvar a quienes quedaron atrapados. Casi 12 horas después del incidente, aún se lograban rescatar sobrevivientes.

Entre las víctimas se encuentra Nelsy Cruz, gobernadora de Montecristi y hermana del expelotero de Grandes Ligas Nelson Cruz. Según la primera dama Raquel Arbaje, Nelsy llamó al presidente Luis Abinader para decirle que estaba atrapada antes de fallecer en el hospital.

También perdieron la vida el exlanzador de Grandes Ligas Octavio Dotel, de 51 años, y el jugador Tony Enrique Blanco Cabrera. El diputado Bray Vargas resultó herido y relató que, al sentir el colapso, pensó que era un terremoto y logró lanzarse hacia una esquina para protegerse.

Hasta el momento se desconoce la causa exacta del colapso. El propietario del local, Antonio Espaillat, quien estaba fuera del país, regresó la noche del martes y aseguró que colaborará con las autoridades en todo lo necesario. “No hay palabras para describir el dolor que esto ha causado”, expresó en un comunicado.

El cantante Rubby Pérez se encontraba en el escenario cuando ocurrió la tragedia. Aunque inicialmente se pensó que había sido rescatado, las autoridades confirmaron que aún lo están buscando entre los escombros. Su saxofonista falleció en el lugar.

Mientras tanto, se instalaron morgues improvisadas cerca del lugar y más de 120 personas acudieron a donar sangre en apoyo a los heridos. Familiares de víctimas y desaparecidos se mantienen a la espera, aferrados a la esperanza de encontrar a sus seres queridos con vida.

El presidente Abinader visitó el sitio del desastre y afirmó que todos los organismos de emergencia están trabajando sin descanso. “Tenemos fe en Dios de que lograremos rescatar a más personas con vida”, dijo.