covid-19 deja en inseguridad alimentaria a indocumentados en California
El análisis “Olvidados durante Covid: Una evaluación de necesidades de inmigrantes en la pandemia”, presentado este lunes, encontró que 57 % de los indocumentados encuestados reportaron carencias alimentarias a causa de la pandemia.
Ana Milena Varón
Nueva York – Casi seis de cada diez indocumentados y sus familias han afrontado carencias alimentarias en los primeros meses de la pandemia de coronavirus en California, reveló una encuesta realizada a más de 91.000 inmigrantes sin estatus legal, que buscaron ayuda del Gobierno estatal y están abogando porque se les tenga en cuenta.
El análisis “Olvidados durante Covid: Una evaluación de necesidades de inmigrantes en la pandemia”, presentado este lunes, encontró que 57 % de los indocumentados encuestados reportaron carencias alimentarias a causa de la pandemia.
NO HAY PARA COMER
De los encuestados que reportaron tener hijos viviendo en casa, 53 % informaron que utilizarían la asistencia para poner alimentos en la mesa de sus hogares.
Mientras, 46 % advirtieron que necesitaban recursos económicos porque las escuelas, donde se provee de alimentos a los niños, estaban cerradas.
El estudio se realizó entre los inmigrantes sin papeles que participaron en el programa de Asistencia de Alivio para Inmigrantes en Caso de Desastre (DRAI), que otorgó en mayo pasado 500 dólares por persona o 1.000 por familia a unos 150.000 indocumentados residentes del estado.
“Nuestros hijos están en casa y ¿qué les decimos, que no pueden comer? Tienen que comer para estar en sus clases”, advirtió en conferencia de prensa Yahaira Baldovinos, participante de la encuesta y que recibió la ayuda de DRAI.
La inmigrante, residente de Antelope Valley, en el sur del estado, reconoció que la ayuda de una sola vez dada por California junto con otros recursos la ayudó “a salir del pozo por un rato”. Sin embargo, recalcó que aún están necesitando más ayuda.
“A quién corresponda, por favor escúchenos, necesitamos más ayuda”, insistió.
A las voces de los indocumentados se están uniendo las organizaciones comunitarias que distribuyeron los recursos de DRAI en mayo, y varios legisladores que buscan que la legislatura estatal y el gobernador Gavin Newsom incluyan a los indocumentados en los nuevos planes de estímulo económico.
En ese sentido Joseph Villela, director de políticas y abogacía de la Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes (CHIRLA), apuntó que la ayuda de DRAI alcanzó solo para ayudar a menos del 10 % de la comunidad indocumentada en el estado, que se calcula en más de dos millones.
“Este reporte quiere educar a los legisladores y a todos los californianos sobre los estragos que está dejando la pandemia del coronavirus en estos residentes del estado, que pagan cerca de 40.000 millones de dólares al año en impuestos locales y estatales”, subrayó Villela.
AL BORDE DE LA CALLE
La inseguridad alimentaria no es el único problema económico que afrontan los indocumentados en California en la pandemia, pues 87 % de los encuestados dijeron que otra gran necesidad es el pago de la vivienda.
El estudio destaca que para octubre de 2020, en los códigos postales en Los Ángeles donde reside la mayoría de los solicitantes de DRAI en esta zona, el alquiler promedio no subsidiado oscila de 2.400 a 2.600 dólares por mes.
A esto se suma que 53 % de los participantes del sondeo dijeron que el pago de los servicios públicos es una necesidad urgente para cubrir en la pandemia.
DE LUJO A NECESIDAD
A la lista de los pagos de los servicios públicos se suma ahora el pago de internet.
Susana Fonseca, una campesina en el condado de Sonoma que perdió su trabajo, subrayó que “antes no era tan necesario pagar el internet, era como un lujo, pero ahora es una necesidad que tenemos que cubrir también para nuestros hijos”.
“Es muy fuerte para nosotros tener que sostener a nuestra familia con la renta, alimentos, y ahora pagar el internet”, insistió la inmigrante, que por la pandemia y los incendios que vivió la zona perdió su trabajo.
Un promedio de 97,5 % de los encuestados dijeron que solicitaron la ayuda de DRAI por haber perdido su trabajo o ver reducidas sus horas de trabajo.
En opinión del asambleísta Miguel Santiago, los indocumentados ya no pueden aguantar más esta devastación económica y es necesario que tanto la legislatura como el gobernador encuentren la forma de ayudarlos a salir adelante.
Por su parte Fonseca, que tiene dos hijos y espera el tercero, envió un mensaje a los funcionarios electos: “Quiero decirles con el corazón que la ayuda es muy necesaria”.
La encuesta fue revelada justo cuando California enfrenta desde este lunes de un nuevo confinamiento regional que afecta a unos 33 millones de residentes en diferentes zonas del estado en medio de una escalada de casos sin precedentes.
Las restricciones -las más severas desde la primera ola en marzo y abril- entraron en vigor el domingo a las 11:59 pm hora local, después de que la capacidad de las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) cayera por debajo del 15 % en dos regiones del estado: el valle de San Joaquín y California Sur (que incluye Los Ángeles y San Diego). EFE News