Nueva York – La detención de dos militares rusos, desertores del Ejército de Ucrania, se produjo en territorio ucraniano, fuera de la península de Crimea, aseguró hoy el jefe del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU), Vasili Gritsak.

“La captura de los delincuentes se llevó a cabo en el paso fronterizo Chongar, en la región de Jersón” vecina de Crimea, dijo Gritsak en una comparecencia de prensa.

Con anterioridad, el Ministerio de Defensa de Rusia había denunciado que dos militares rusos, identificados como Maxim Odintsov y Alexandr Baránov, habían sido llevados ilegalmente desde la península de Crimea, anexionada por Rusia en 2014, hasta Ucrania.

Según una fuente del Estado Mayor de la Flota rusa del mar Negro, que tiene su principal base en la península de Crimea, los dos militares, un suboficial y un sargento, fueron llevados a un puesto fronterizo engañados, con la promesa de que les entregarían sus diplomas universitarios ucranianos.

Un vez allí, Odintsov y Baránov, que tras al anexión de Crimea desertaron del Ejército ucraniano y incorporaron a las Fuerzas Armadas de Rusia, fueron detenidos por agentes del SBU y trasladados a la región ucraniana de Nikoláyevsk.

Según la versión ofrecida por el jefe del SBU, los desertores fueron capturados cuando intentaban comprar diplomas ucranianos para obtener el grado de oficial en el Ejército ruso. EFE