El poderoso sindicato estadounidense Teamsters, representante de conductores de carga y de trabajadores de almacenes, anunció este miércoles que por primera vez en casi tres décadas ha decidido no dar su apoyo a ningún candidato presidencial.

La agrupación dijo haber tomado esa decisión tras seis meses de encuestas a sus miembros en Estados Unidos y casi un año de entrevistas a los aspirantes a la Presidencia.

En este tiempo, señaló, no ha conseguido ni de la vicepresidenta y candidata demócrata, Kamala Harris, ni del exmandatario y aspirante republicano Donald Trump (2017-2021) compromisos suficientes sobre los temas que preocupan a sus integrantes.

“Alentamos encarecidamente a todos nuestros miembros a votar en las próximas elecciones y a seguir involucrados en el proceso político, pero este año ningún candidato a presidente ha obtenido el respaldo”, dijo el sindicato.

Fundado en 1903, Teamsters representa a 1,3 millones de personas en Estados Unidos, Canadá y Puerto Rico. En 1996 y en 1960 también se abstuvo, según el diario The Hill.

En una encuesta electrónica efectuada a sus miembros entre los pasados 24 de julio y 15 de septiembre, un 59,6 % había apuntado que Teamsters debería decantarse por Trump y otro 34 % prefería a Harris.

El magnate republicano también había resultado ganador en un sondeo telefónico llevado a cabo del 9 al 15 de septiembre, con un apoyo del 58 %, frente al 31 % de Harris.

Teamsters había avanzado este mismo miércoles que no iba a tomar su decisión “a la ligera”.

Antes de que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, renunciara a la reelección el pasado 21 de julio, el respaldo de los integrantes de esa agrupación hacia él superaba al de Trump, con porcentajes respectivos del 44,3 y 36,3 %.

“Las extensas encuestas entre los miembros del sindicato no mostraron un apoyo mayoritario para Harris ni un apoyo universal para Trump”, dijo el comunicado de la organización a la hora de justificar no tomar partido por ninguno.

El presidente de Teamsters, Sean O’Brien, participó el pasado agosto en Milwaukee en la Convención Nacional Republicana que formalizó la candidatura de Trump de cara a los comicios del 5 de noviembre. No le dio su apoyo, pero su mera presencia en el foro hizo pensar en un posible cambio de tendencia en el respaldo de esa organización, que durante años había optado por los demócratas. EFE