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Futuro alimentario del planeta implica retos para la ciencia

En 2030 la población mundial será de 8.500 millones de personas y veinte años después rondará los 9.600 millones, según las cifras difundidas en el acto celebrado este martes en el Museo Universitario del Chopo.

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Nueva York – Expertos reunidos para la 40 entrega del Premio Nacional en Ciencia y Tecnología de Alimentos de México, que concede anualmente el Conacyt y la Industria Mexicana de Coca-Cola, coincidieron hoy en que los retos de alimentar al planeta en 2050 son “enormes” y pasan por soluciones científicas y tecnológicas.

“El reto mundial es enorme, en 2050 debemos incrementar en un 70 % la producción de alimentos y cumplir con parámetros de seguridad, producir alimentos de calidad, nutritivos e inocuos. Sin la ciencia y la tecnología difícilmente estaremos a la altura”, afirmó Enrique Cabrero, director de la Comisión Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).

En 2030 la población mundial será de 8.500 millones de personas y veinte años después rondará los 9.600 millones, según las cifras difundidas en el acto celebrado este martes en el Museo Universitario del Chopo.

La agricultura produce actualmente una cuarta parte de los gases del llamado efecto invernadero y consume un 70 % del agua dulce del planeta.

Joan Prats, el vicepresidente de Asuntos Públicos y Comunicación de Coca-Cola en México, empresa que patrocina los premios desde su creación en 1976, resaltó que “en 40 años más de mil científicos se han visto beneficiados por este premio”.

Este año se premió un trabajo sobre la micro encapsulación de sulforafano -un elemento presente en el brócoli-, impulsado por el Instituto Tecnológico de Sonora.

Otro dedicado a la microbiótica bacteriana del queso Cotija (un queso maduro mexicano) y su potencial metabólico, desarrollado por el Instituto de Biotecnología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Mención honorífica obtuvo otro sobre los cambios en la actividad de antioxidantes y antiinflamatoria de aislados proteicos del frijol negro, efectuado por la Escuela de Ingeniería del Instituto Tecnológico de Monterrey, campus Monterrey (norte de México).

De la misma institución fue distinguido el aporte para la recuperación primaria de compuestos bioactivos producidos en zanahorias mediante la aplicación de estreses abióticos.

Fue asimismo reconocida una investigación conjunta de varias instituciones académicas mexicanas que puso de manifiesto la respuesta de las células cancerígenas mamarias al entrar en contacto con el compuesto dietario conocido como resveratrol, presente en alimentos como uvas, moras, cacahuates, y vino tinto.

Lidia Dorantes Álvarez, investigadora del Instituto de Biotecnología del Instituto Politécnico Nacional (IPN), con 50 años de trayectoria, fue galardonada con el Premio Nacional al Mérito por aportar más de 64 artículos e investigaciones importantes al área de los alimentos.

“México tiene un gran potencial como zona tropical y semitropical porque tenemos alimentos con gran diversidad genética”, indicó en su intervención.

El trabajo de Dorantes se ha centrado en las propiedades del aguacate, cuyo consumo, según la investigadora, puede reducir el riesgo de contraer enfermedades crónico-degenerativas, como los problemas maculares, o combatir el colesterol.

El equipo de Dorantes está investigando los beneficios de los chiles, de los que en México existen más de 90 variedades pero solo se cultivan 20, y cuyos beneficios en el combate de bacterias podrían colaborar en la mejor conservación de cárnicos y productos lácteos.

El galardón entregado hoy está dotado con una bolsa de más de un millón de pesos anuales (50.000 dólares) y en sus cuatro décadas de historia ha significado una inversión de más de 100 millones de pesos (50 millones de dólares). EFE

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