Su hijo tiene congestión nasal, tos y fiebre. ¿Es gripe? ¿COVID? ¿Un resfriado común? ¿O son síntomas del virus respiratorio sincitial (VRS)? ¿U otro virus que se sabe que causa el resfriado común? Parece que hay muchos, especialmente en niños pequeños, que pueden tener varios resfriados al año.

Los virus pueden mantener a su hijo fuera de la escuela durante días y no se curan con antibióticos. Los días que está enfermo significan perderse actividades y tiempo con los amigos. Una de las mejores maneras de mantener sanos a todos es vacunarse cuando sea posible, según la American Academy of Pediatrics.

“Los niños pasan mucho tiempo en interiores, cerca de otros durante el invierno. Es fácil compartir gérmenes cuando se juega, sobre todo para los niños más pequeños, que quizá no sean tan buenos limpiándose la nariz o lavándose las manos”, dijo la Dra. Joanna Parga-Belinkie, neonatóloga, pediatra y madre de tres hijos.

“No es demasiado tarde para vacunar a su hijo contra la gripe y la COVID para ayudar a evitar que transmita y contraiga virus durante el juego. Estas vacunas ayudan a estimular el sistema inmunitario. Es como cuando tu teléfono actualiza su software para reconocer y resistir a los virus. Este impulso ayuda a proteger a los niños y a la comunidad de enfermedades graves”.

Si su hijo no se siente bien y tiene fiebre, congestión nasal, tos, dolor de cabeza o dolores corporales, está vomitando o tiene diarrea, lo más probable es que se deba a un virus. Hay pruebas para detectar la gripe, el VRS y otras causas de enfermedades. Asegúrese de llamar a su pediatra para ayudar a determinar si necesita hacerse una prueba y si podría tratarse de gripe, COVID o un resfriado.

Pregúntele a su pediatra sobre la vacuna contra la gripe. Se recomienda para todas las personas a partir de los 6 meses de edad cada año. Solo el año pasado, en 2024, casi 200 niños estadounidenses murieron de enfermedades relacionadas con la gripe. El ochenta y tres por ciento de los niños que murieron a causa de la gripe no estaban vacunados, lo que deja claro que la vacuna contra la gripe ayudó a evitar que los niños se enfermasen gravemente.

También es importante recibir la vacuna actualizada contra la COVID. Este virus no ha desaparecido y sigue enfermando a los niños. En agosto de 2024, durante un pico de COVID, casi el 6% de las visitas al departamento de emergencias de niños menores de 5 años fueron por COVID, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.

Por último, la causa más común de hospitalización en lactantes menores de 1 año es el VRS. El VRS, que infecta a casi todos los niños al menos una vez antes de los 2 años de edad, puede ser peligroso. La infección se puede propagar a los pulmones y causar problemas respiratorios graves que no se pueden controlar en casa. La inmunización Nirsevimab (Beyfortus) es para bebés menores de 8 meses de edad durante la temporada de VRS. También es para algunos niños de 8 a 19 meses de edad que tienen un mayor riesgo de enfermedad grave por VRS y que entran en su segunda temporada de VRS.

Healthy Children, el sitio web para padres y cuidadores de la American Academy of Pediatrics, ofrece más información en healthychildren.org.