Nueva York – Iglesias californianas reanudaron este fin de semana sus servicios religiosos en el interior y con presencia fieles después de la reciente decisión de la Corte Suprema que determinó que el estado no puede restringir ese derecho en su intento de mitigar los contagios de la covid-19.

El pronunciamiento de la Corte Suprema realizado el viernes en la tarde responde a una demanda presentada por las iglesias Pentecostal Unida de South Bay, en Chula Vista, y Harvest Rock, en Pasadena.

La iglesia Pentecostal Unida de South Bay tuvo el sábado una ceremonia presencial en memoria de Tony Zúñiga, miembro de largo tiempo de la congregación fallecido recientemente.

Igualmente realizó este domingo un servicio religioso en la mañana presidido por el Reverendo David McGovern y tiene programado otro servicio para la tarde con Jesús Magallanes.

La Corte Suprema concluyó que el estado de California no puede prohibir la celebración de servicios religiosos con la asistencia de personas dentro de las iglesias, aunque sí puede restringir a un 25 % la presencia de fieles y limitar los cantos religiosos como parte de sus medidas para intentar evitar los contagios de coronavirus.

Como respuesta, la Gobernación de California estableció que en las regiones del estado donde la covid-19 presenta mayores índices de contagio, las iglesias pueden realizar ceremonias con el 25 % máximo de asistencia y en áreas donde los porcentajes de contagio son moderados o mínimos la capacidad se limita al 50 %.

“Continuaremos haciendo cumplir la restricciones que la Corte Suprema avaló y luego de la decisión presentaremos guías revisadas para los servicios de adoración para continuar protegiendo las vidas de los californianos”, dijo en un comunicado Daniel López, secretario prensa de la Gobernación.

La arquidiócesis católica de Los Ángeles, la más grande del país, con más de 5 millones de fieles, agradeció a la Corte Suprema y pidió a los fieles que quieran asistir a los oficios religiosos que mantengan la distancia social y usen mascarilla, entre otras medidas.

Guardando la distancia social y limitando el número de asistentes en la mañana de este domingo se celebró una misa en la catedral angelina presidida por el padre Raymont Medina.

Los fieles no interpretaron cánticos, pero la cantante oficial de la ceremonia -como se ha venido haciendo- entonó los cantos religiosos usando una mascarilla de protección.

En mayo de 2020, la Corte Suprema había respaldado la prohibición de California que prohibía la presencia de los fieles en el interior de los templos en áreas de alto contagio de la covid-19, argumentando el riesgo salud.

Numerosas organizaciones religiosas calificaron la decisión del año anterior como una restricción indebida a la libertad religiosa en el país, alegando que muchos negocios como los supermercados, los casinos y los centros comerciales podían recibir personas pero no así las iglesias en sus ceremonias. EFE News